Labores del Viñedo en Otoño: preparando el terreno para un nuevo ciclo

Viñedos en otoño

Tras la vendimia, llega el otoño, una temporada de merecido reposo para agricultores y viñedos. Este periodo de descanso es crucial para asegurar una buena cosecha en el siguiente ciclo reproductivo de las plantas. En las siguientes líneas te detallamos las principales tareas que se llevan a cabo durante esta época para que puedas conocer un poquito más sobre nuestro trabajo como viñadores.

Viñedos en otoño

Poda de Invierno: todo un arte que se transmite de generación en generación

La poda de invierno es una de las tareas más cruciales para el cuidado de los viñedos. Esta operación, que se lleva a cabo cuando la planta ha completado su ciclo productivo, implica el corte de pámpanos agostados, dejando solo las yemas fértiles y productivas que darán lugar a nuevos brotes y racimos. Es un ejercicio que combina el arte y la ciencia de la viticultura y sienta las bases para la cosecha del próximo año. Es tal su importancia, que la poda de la vid es realizada sólo por los viñadores más experimentados, legado que transmiten a las nuevas generaciones año tras año.

Sostenibilidad y respeto por la Tierra

El abonado orgánico también una labor esencial que se lleva a cabo en otoño. A través de la aplicación de materia orgánica compostada de estiércol ovino proveniente de la ganadería local junto a los restos de la vendimia como son los orujos, borras y escobajos, se enriquece el suelo con los nutrientes necesarios para mantener la vitalidad de las vides durante todo el año. Esta práctica no solo contribuye a la salud de las plantas, sino que también promueve la sostenibilidad y el respeto por el entorno.

La inspección sobre el terreno nos permite observar la aparición de malas hierbas y otras plantas que en algunos casos son retiradas, mientras que otras se mantienen para mantener el suelo vivo. Las plantas retiradas sirven, a su vez, como abono natural del terreno que tienen un impacto positivo en la salud de los viñedos. Estas prácticas devuelven la materia vegetal al suelo, enriqueciéndolo con nutrientes esenciales para el desarrollo de las vides. Además, facilitan el trabajo de los viticultores durante los meses más rigurosos del invierno.

En La Bodega de las Estrellas entendemos la importancia de comprender la biología y el crecimiento de la vid como ser vivo. Esto nos permite preservar y mejorar el legado recibido de nuestros antepasados, manteniendo un equilibrio armonioso con la naturaleza que nos rodea.

 

Si deseas adentrarte en los secretos de nuestra viticultura, te invitamos a visitarnos en nuestra bodega. No hay mejor forma de conocer la vida de nuestros viñedos que desde su lugar de origen. ¡Te esperamos!

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